Lecciones de Vida de una Naranjita

  • El siguiente texto, denominado «Lecciones de Vida de una Naranjita», es una transcripción del Discurso de Graduación dio un servidor el pasado viernes 26 de abril, a un grupo de graduados de Maestría en Negocios de una universidad privada, durante su Ceremonia de Graduación.

Me da tanto gusto poder acompañarlos en este momento, no solo porque, en cierta manera, con ustedes se va una parte de mí al haber sido su profesor, sino porque irremediablemente me hacen recordar el día que yo me gradué de mi maestría.

Y ahora, que he tenido la oportunidad de hacer una pequeña pausa, me doy cuenta que ya hace 7 años desde entonces, cuando era yo mas joven y con un entusiasmo desbordado, como lo son ustedes ahora. Cuantas cosas he aprendido hasta ahora, que no me enseñaron en la escuela

Y antes de felicitarlos por éste, su día, quiero compartirles un pequeño cuento. No me atrevería a darles un consejo como tal, porque como ya lo dijo Ellen DeGeneres en 2009, lo malo de dar consejos es que eventualmente «regresarán a ti y te morderán el trasero».

“Había una vez una pequeña naranja, que nació en un árbol en medio del campo. Durante todo el tiempo que estuvo colgando de su ramita, observó el mundo e imaginó todo lo que haría cuando por fin fuera madura y libre; los lugares que visitaría, las personas que conocería y las experiencias que tendría. Cuando el día finalmente llegó, la naranja cayó al suelo y sin esperar nada más, ignorando todas las naranjas podridas que yacían junto al árbol, emprendió su viaje. En uno camino cercano se cruzó con un joven arriero, quién la levantó del piso y se la comió”.

¿Trágico final para la naranjita verdad? Escribí este cuento cuando tenía 8 años de edad. Cuanta sabiduría esconde un niño en su pequeña cabeza; quizás entonces, comprendía mejor que hoy la naturaleza de la vida.

Y es hasta hoy, 24 años después, que finalmente comprendí tres valiosas lecciones de ese pequeño cuento, y que quiero compartirlas de hoy en adelante con ustedes.

  1. Lo que definirá en buena medida nuestro futuro será lo que aprendamos, no mientras estemos en nuestro árbol, sino lo que aprendamos una vez que hayamos bajado de él. Nuestra casa y nuestras escuelas son nuestros árboles, donde podemos observar el mundo sin que nada nos dañe, pero eventualmente tendremos que bajar y empezar a vivir, pagando por nuestros errores pero cosechando también las recompensas de nuestros éxitos.
  2. “Conócete a ti mismo». No seas como la joven naranja, que en su juventud y torpeza, nunca supo que era una naranja y por eso terminó siendo comida. Ya existen en el mundo demasiadas cosas que no conocemos ni controlamos, pero hay algo que si podemos conocer y controlar, y es a nosotros mismos.
  3. La vida es efímera. Toda una vida de tranquilidad y seguridad puede terminar abruptamente, ¿por qué no tomar el riesgo ahora? La pequeña naranja lo sabía, y prefirió ésto a yacer podrida cerca del árbol, junto a todas las demás, viviendo una vida sin propósito.

Y ya para finalizar, y no aburrirlos con más cuentos absurdos sobre comida, porque seguramente a estas alturas ya tienen algo de hambre y están listos para celebrar, les quiero compartir el epílogo del cuento:

“Después de comerla, el joven arriero lanzó las semillas de la naranjita a una huerta cercana. Un año después, se erguía frondoso un pequeño naranjo”.

La vida da muchas sorpresas mis -ahora- jóvenes colegas. Nunca sabes quien llegará a transformar positivamente tu vida, y llenarla de propósito.

Por ustedes, mis jóvenes graduados, es este día, y recuerden que no es el título lo que los hace valer, sino lo que ustedes estén dispuestos a hacer por hacer valer su título. Defiendan la dignidad y el honor de profesión encima de todas las cosas, y si no lo hacen por ustedes mismos, miren a sus compañeras y compañeros que están hoy a su lado, y háganlo por ellos.

¡Felicidades!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.